2. Materiales naturales.

2.1. Los derivados del petróleo. 

La palabra petróleo; procede del latín (petrus, piedra; y óleum, aceite); es nombre viene de su apariencia aceitosa y de su origen mineral. Es un líquido viscoso y oscuro. Se origina por la descomposición durante millones de años de la flora y la fauna marinas por la falta de oxígeno, la baja presión y las temperaturas elevadas. Lo encontraremos impregnando rocas porosas confinadas entre estratos de roca de impermeable, en profundidades que pueden ser desde la superficie hasta de miles de metros de la profundidad.
La composición química del petróleo es una mezcla de hidrocarburos, es decir, compuestos constituidos por cadenas moleculares de carbono e hidrógeno de variada longitud. Contiene diferentes tipos de hidrocarburos, desde los más simples como el metano hasta largas y pesadas cadenas como los que forman los asfaltos. Otros elementos se encuentran en pequeñas proporciones como el oxígeno, el nitrógeno y el azufre.
En la actualidad, los derivados del petróleo son muy importantes para nuestra vida diaria. Los combustibles que se obtienen del petróleo cubren el 70% de las necesidades energéticas mundiales. Pero este combustible tiene un doble problema: por un lado, se trata de un recurso limitado; por otro lado, contaminan al medioambiente y tienen que respetar las políticas del petróleo.
El petróleo crudo tiene poca utilidad, por eso es necesario refinarlo. Las refinerías son grandes plantas industriales en las que el petróleo es sometido a procesos físicos y químicos con el fin de obtener diferentes hidrocarburos de los que está compuesto. El principal  proceso físico es la destilación: donde el petróleo evaporado asciende por una estructura llamada torre de fraccionamiento; en ella el vapor se va enfriando para que se separen los diferentes hidrocarburos, aunque los más pesados necesitan condiciones especiales, ya que tienen que destilarse al vacío. El principal proceso químico es la descomposición térmica, que consiste en el calentamiento del crudo a grandes presiones, por lo que no hay evaporación sino descomposición.
Una vez concluido el proceso de refinado obtenemos una amplia variedad de hidrocarburos. Muchos de los productos son la materia prima de la industria petroquímica.

2.2. La piedra natural. 
Durante muchos siglos, la piedra natural la han utilizado para construir las pirámides de Egipto, las catedrales medievales, para la escritura, etc. Aunque tiene un problema que es el transporte. Hoy en día, la piedra natural ha sido sustituida en la construcción por el hormigón y el silestone, por lo que solo se emplea como elemento ornamental.
Las piedras naturales se pueden clasificar en cinco grupos:
• La arenisca: es una roca sedimentaria formada por arena y un aglutinante natural. Se usaban para la construcción de castillos, puentes, iglesias, etc.


• Las pizarras: son rocas metamórficas, es decir, rocas que después de haberse formado han sido sometidas a altas presiones y temperaturas que las han transformado. Gracias a su impermeabilidad son muy usadas en la construcción de tejados.

• Las rocas calizas: su principal componente es el carbonato cálcico. Ha sido el material más usado para la construcción de catedrales gracias a sus propiedades mecánicas y su facilidad para ser talladas en forma de bloques rectangulares. Aunque tienen un problema, el cual es que son muy vulnerables al ataque de los ácidos.
• El granito: es una roca intrusiva, es decir, formada a partir del magma a grandes profundidades, que se ha enfriado muy lentamente debido a las grandes presiones. El granito es extremadamente duro, pesado y resistente, lo que supone un inconveniente para transportarlo y trabajarlo. Actualmente, es muy utilizado para la elaboración de encimeras de cocina, las
lápidas, etc.

• El mármol: es una roca metamórfica. Es el mejor tipo de piedra para la ornamentación sin renunciar a las propiedades mecánicas. Se obtiene de la transformación de la roca caliza; pueden presentar desde tonos negros a blancos. En la actualidad es el principal material usado por la arquitectura funeraria.

 2.3. La madera. 
Es flexible, ligera, dura, abundante y fácil de trabajar. Esas características la han convertido en una de las materias primas más explotadas. Actualmente, se está produciendo la deforestación a un ritmo alarmante debido a su uso indiscriminado.
Los dos principales componentes de la madera son la celulosa y la lignina. La celulosa es un polisacárido obtenido de la unión de cientos de moléculas de glucosa mientras que la lignina está formada por alcoholes y ácidos.
Existen tantos tipos de madera como especies de árboles y cada una tiene aplicaciones específicas, tanto ornamentales como arquitectónicas.

2.4. los metales. 
Los metales son elementos que se distinguen por presentar algunas de las siguientes propiedades:
- Suelen tener apariencia brillante.
- Son dúctiles, es decir, pueden deformarse en frío para formar hilos.
- Son maleables,  es decir, pueden deformarse en frío para formar láminas.
- Son buenos conductores del calor y la electricidad.
- En soluciones acuosas forman iones positivos.

Los metales con facilidad con otros elementos, formando compuestos; por eso en la naturaleza están en forma de minerales. Los metales tienen un efecto indeseado causado por la reactividad de los metales es la corrosión. La excepción a esta regla son los metales nobles, que por su baja reactividad son los mejores para la industria de la joyería; donde los metales más empleados son el platino, el paladio y lo más apreciados el oro y la plata.
Muchos metales mejoran sus propiedades al mezclarse con uno o más elementos. Estas mezclas reciben el nombre de aleaciones. El bronce es una aleación formada por cobre y estaño; el latón se obtiene de una mezcla de cobre y cinc; la alpaca es un sucedáneo de la plata que tiene tres componentes: cinc, cobre y níquel. Al mezclar el hierro con el carbono dará acero.
El oro y la plata también deben unirse en aleación con otros metales para ponerse más duros.